Powered By Blogger TM


viernes, junio 13, 2003

 
No se si fueron los Special K, o el vestido de Gucci, el calor o la sesión del DJ. A lo mejor fue una mezcla de todos estos ingredientes lo que hizo que la noche fuese un poco salvaje. Empezaré por el principio.



Me levanté con un poco de dolor de cabeza. Puede que hubiese sido el aire acondicionado que lo puse un poco frío para poder dormir bien. Estuve pensando un poco si quedarme en la cama o ponerme a desayunar. Me acordé de los desayunos de Londres, de los Brunch. Pero como no tenía nada parecido decidí desayunar los Special K. Cosa rara en mi. El caso es que durante todo el día estuve de buen humor.



Decidí que me iba a comprar el vestido de Gucci de color carne. Es de una sola pieza de pantalón short y una blusa un poco ancha de mangas largas, pero muy finita. No me costó decidirme esta vez. Sabía lo que quería, me lo probé, y la chica de la tienda estuvo haciéndome la pelota durante algún tiempo. Así que además de con el traje salí con el ego subido.



Dos horas en la piscina y media hora fuera fueron todo lo que aguanté por el calor. Pero no quería ir a casa a poner el aire acondicionado. Justo cuando me vestía en el vestuario recibí la llamada de Paula. Había fiesta inauguración de una multinacional en una de las discotecas más modernas de BCN. De plato fuerte venía un DJ londinense de mucha reputación, al cual yo no conocía ni de oídas. Me gustó la idea: podía estrenar mi vestido de Gucci, y además no pasaría mucho tiempo en casa.



Paula y yo quedamos a las diez en punto. Venía con su precioso descapotable. Hacía tiempo que no me montaba con ella en su coche. Me vino bien, porque hacía mucho calor, así que el aire hizo que me refrescase un poco. Paula iba todo lo contrario a mí. Un vestido negro de pantalón y blusa corta escotada. Muy guapa ella, pero no tanto como yo. Lo mejor de las fiestas de multinacionales es que puedes beber normalmente un champagne muy bueno. En este caso era exquisito y entraba muy bien. Quizás ese fue el fallo, ya que en cuanto el DJ se puso a pinchar yo ya estaba bailando. Paula estaba extrañada pero me acompañó. El DJ era guapísimo. Menos londinense parecía de todo. La sesión fue corta pero muy amena. La música se bailaba muy bien y la gente no podía dejar de mirar a dos chicas como nosotras bailando en el centro de la pista. Cuando acabó me presentaron al agente del DJ que sabía hablar un poco castellano. Me conocía de un video clip del anterior disco así que empezamos a hablar de que alive queríamos hacer de DJ alguna vez. Entre risa y risa le comenté que me presentase al guapo DJ. Como todo el día había sido fabuloso y todavía tenía fuerzas de los Special K supe desde el principio que algo pasaría con el DJ. Y así fue. Para cuando me quise dar cuenta me estaba besando a las puertas del baño y salíamos en taxi al hotel Arts que era donde se hospedaba. Fue muy divertido, sobre todo por la sensación de día perfecto que sentía. Aunque quedaba poca noche la aprovechamos muy bien. Tampoco quise quedar con él para hoy. Había sido demasiado perfecto como para que la siguiente vez saliese bien.

• • • • •


jueves, junio 12, 2003

 
Últimamente estoy volviendo a escuchar discos que hacía tiempo no escuchaba. El año pasado compré un recopilatorio de música francesa con un título muy frances: ‘C’est la France’. Es muy apropiado para momentos relajados. En este disco descubrí a un artista que me ha gustado mucho que es Benjamin Biolay del que hemos hecho una adaptación. Me hizo ilusión cuando SouvenirDJ comentó que no se parecía en nada a la versión original. Creo que ha quedado muy bien.



Este recopilatorio viene muy bien al día de hoy, porque acabo de escuchar que en Francia han hecho un spot con Woody Allen para que los norteamericanos vayan a Francia, porque después de la guerra de Irak ya no iban nada. No entiendo como a las personas les pueden afecta tanto las decisiones de sus países. Seguro que si a los americanos les pusieran ‘Les cerfs volants’ o ‘Ne dies rien’ irían rapidamente a conocer el sitio donde se han hecho canciones tan bonitas, los paisajes que evocan, y por qué no, a escuchar la lengua más romántica que existe. Y es que Francia me encanta. Desde el Biarritz hasta Estrasburgo, y desde Calais hasta la costa azul. Y París es una de las ciudades más bonitas para pasear, para pensar en cosas que hasta ahora no eran importantes, mientras la orquesta suena, y las melodías con voces profundas susurran las frases que nunca sabrás lo que significan, pero que dicen todo. Con las hojas de los árboles cayendo al ritmo de las canciones. No conozco ningún sitio dónde el caer de las hojas de otoño sea más bonito.



Y pensar que hay alguna persona que dejará de visitar cosas tan bonitas porque los dos presidentes se llevaban mal por temas políticos. Es triste. Muy triste. Pero supongo que hemos nacido así, que en el fondo somos animales que hacemos caso al que más poder tiene de la manada. Viendo la nueva serie de cómo los humanos nacieron, ves cosas sorprendentes. Aunque solo vi quince minutos. Soy de los que no puede pensar que en el fondo somos más animales de lo que nos creemos.

• • • • •


miércoles, junio 11, 2003

 
Está empezando a hacer mucho calor. Parece mentira como hace sólo un mes me cruzaba al otro lado de la calle, dónde daba el sol, porque me hacía sentirme mejor. Y ahora busco cualquier resto de sombra para ocultarme de él. Es una de esas relaciones de amor/odio que cambia con el tiempo. Es como un amor condicionado a que no haga demasiado calor. Intento evadirme en la piscina, pero dura poco. Lo malo de una estrella del pop es que tiene mucho tiempo libre. Y es lo que me está pasando en estos momentos. El disco está terminado. El diseño también. Solo falta imprimirlo. Y mientras tanto... calma.



Tengo todo el día libre, pero estoy tan pasiva que no se qué hacer. Podría intentar buscarme algo fuera del gimnasio y la piscina. O incluso visitar a mis familiares del norte. Pero no me apetece. Soy como la protagonista de una canción de Chico y Chica. Soy como nunca quise ser. Menos mal que se me pasará. Incluso estuve tentada a apuntarme a cursos de baile. Pero sola no quiero ir porque es muy difícil encontrar chicos solteros sin compromiso en esos cursos. Me pregunto qué harán los demás famosos.



Dentro de poco empezamos a tener fiestas. El sábado el Sonajero se celebrará en el Sweet de Lluis y Toni. El sábado que viene la fiesta presentación del disco de Moonpalace de Juanra en el KGB y si la suerte nos acompaña intentaremos celebrar la nuestra el siguiente, pero solo si todo va bien. Sería perfecto. Lo intentaremos. Tanto tiempo yendo a fiestas de otros, tengo ganas de celebrar una para mi con mis fotos colgadas por doquier.



Parece que me voy animando poco a poco. Seguramente saldré de compras esta tarde. He visto un vestido de Gucci como muy sugerente. La primera vez que lo vi no me gustó, y es que el color carne no me gusta. Pero el fin de semana en Londres lo volví a ver en Bond Street y me gustó mucho más. A lo mejor si. Antes de que empiecen las rebajas y todo se llene de gente vulgar.

• • • • •


martes, junio 10, 2003

 
Tres días en Londres dan para mucho. Sobre todo para observar las diferencias que hay entre culturas. Salimos el sábado por la mañana. Pasé a recoger en taxi a [alive o->]. Los dos nerviosos, porque aunque ya hemos viajado cada uno lo nuestro, lo de preparar todo y madrugar pone nervioso a cualquiera. Todo perfecto, porque la secretaria de la discográfica había dispuesto todo ordenado y de forma que no nos equivocásemos. En Londres estábamos al lado de Notting Hill y de los jardines de Kensington. A [alive o->] le hacía mucha ilusión estar allí, le recordaba a muchas películas y sobre todo a Lady Di. Había una cafetería que se llamaba Diana y que tenía todas las paredes llenas de fotografías de Lady Di.



El primer día fuimos al mercado de Portobello. Es un mercadillo que está lleno de antigüedades. Bueno, en realidad todos los mercados a los que fuimos estaban llenos de antigüedades. Son muy clásicos los ingleses [si no todos, por lo menos la mayoría]. Después por los palacios de Kensington y Hyde Park, y a la tarde una vuelta por las callejuelas de Londres, y el South Park. Lo han dejado precioso, incluido los restaurantes de Sushi japonés que van rotando la comida por delante de los comensales. Muy cool.



El domingo nos fuimos a Candem Town. Más mercados, pero este es muy grande y hay muchas cosas. Mucha ropa y mucha cosa rara. Como nos habíamos levantado muy pronto y llevábamos mucho tiempo andando decidimos parar en un pub y tomar algo. Cuando pedí mi pinta me dijeron que los domingos no se servía alcohol antes de las doce del mediodía. No me lo podía creer. Otra cosa rara de los ingleses. Por la tarde paseamos por el Soho. Como los domingo está todo abierto hasta las cinco, pues paseamos hasta las cinco. Después nos aburrimos un poco.



El lunes habíamos quedado con los de la discográfica a las once, así que nos fuimos a Covent Garden y alrededores. Es una zona muy bonita. Está cerca del Soho y no sabes cuando estás dentro y cuando estás fuera. A las once llegamos allí puntuales y ellos tardaron cinco minutos, así que lo de la puntualidad inglesa debe estar desapareciendo. Yo tenía una esperanza de que los miembros del grupo británico que nos gusta estuviesen allí, pero resulta que no. Estaba su agente y los de la discográfica. Yo desde ese momento estuve un poco deprimido, porque después de llegar hasta Londres, lo único que sacamos fue el compromiso de un remix y de que quizá nos produjesen un par de singles. No está nada mal, pero yo quería algo más. Tendremos que esperar. Poco a poco, y es algo que no me gusta nada, soy muy impaciente.



[alive o->] se había encaprichado de una sartén para hacer crepes, así que nos subimos por Bond Street que le encantó con sus tiendas caras, hasta casi Regents Park que era dónde le habían dicho que había una tienda de moda que tendría cosas de esas. Fue curioso que lo único que compró en Londres fue una sartén para crepes. Es verdad que la ropa que exponen en Londres no es del gusto de [alive o->]. Es muy rara y muy poco elegante. Más tarde en el aeropuerto se encaprichó de un bolso que al final no se compró.



Como resumen. Ha sido un fin de semana diferente con lo cual ha sido bueno para nosotros. Ya estamos preparando todo para dentro de tres semana y desconectar ha sido perfecto. El lado malo es que no conseguí lo que quería. Pero esto le suele pasar a todo el mundo. Por cierto, ha hecho un tiempo fabuloso.

• • • • •


alive
   
[el mundo electrónico de un grupo pop]



Enlaces recomendados:



Contacto: