Estoy desmoralizado. Justo en el momento en el que creativamente me encuentro mejor llego y me vengo abajo. Llevo varias semanas sin dejar de componer canciones, y además canciones que me gustan mucho, pero luego me da por pensar que para qué. Que a quien le importa el que yo componga canciones si solamente las escucharán aquellos a los que yo mismo se las ponga. A veces incluso pidiéndoles el favor de que las escuchen, que a lo mejor les gustan. Es muy duro llevar casi un año con un disco producido y que nadie lo quiera sacar. Seré yo el único que me crea que es muy bueno lo que han hecho y que puede gustar mucho más que otros discos de serie B que salen al mercado. Supongo que a esto se le llama ego, pensar que lo tuyo es mejor que lo de los demás.



El otro día en el metro se me humedecían los ojos al pensar que todo se había acabado. Que a lo mejor mi futuro es escribir canciones para los demás, si es que las quieren. Que no tiene sentido plantear conciertos, ni pinchadas,? Que viviría mucho más tranquilo dando portazo a esta ilusión con la que nos hemos gastado todos nuestros ahorros, muchas noches sin dormir,? Después me levanto y pienso que es mejor luchar un poquito más, que no perdemos nada. Y me pongo a componer, porque me gusta de verdad. Y paro de repente pensando que ya soy mayor para todo esto, que ya no tengo ganas de luchar.



¿Si ha merecido la pena? Pues claro que sí. Sin la música no tendríamos ni la mitad de los amigos que tenemos, ni habríamos pasado por experiencias inolvidables, ni nos emocionaríamos cuando leemos por Internet que gustamos. Sí, a unos pocos pero gustamos. ¿No es eso suficiente?



Así que seguiremos un poquito más. ¿Cuánto? Hasta que el cuerpo aguante, que le falta poco. Y entonces tendré una vida como la de los demás, cambiaré prioridades, y me convertiré en lo que nunca quise ser. No lo digo muy convencido, en el fondo siempre me he creído algo diferente. Ya ves, encima con el ego subido.



final.
(Del lat. fin?lis).
1. adj. Que remata, cierra o perfecciona algo.
2. m. Término y remate de algo.
3. f. Última y decisiva competición en un campeonato o concurso.